Mi árbol de otoño

Se dice mucho sobre la poesía. Según Oscar Hahn, poeta chileno, la muerte de la poesía ha sido anunciada desde siempre. También existe la falsa premisa de que en el pasado los amantes de la poesía abundaban y ahora son una especie en extinción. Acá hay una. 

Hace una semana exacta arranqué mi noveno año de Taller Literario, donde cada semana, junto a un grupo amigos y fanáticos de los libros, compartimos el amor por las letras. 

Paradójicamente, el primer tema fue la poesía surrealista. Interpretamos la vida y obra de Paul Eluard y Aldo Pellegrini. Si bien varios pueden pensar que la poesía suele estar relacionada al romanticismo extremo, los invito a leer estos dos.

En fin, con no muchas ganas de extenderme, les comparto un poco de mi apreciación sobre el otoño, mi estación del año preferida, en donde explico de una manera, capaz no tan convencional, su personificación en un árbol.

No suelo mostrar lo que escribo. Pero sí aprovecho este lugar para expresar que uno siempre tiene que encontrar algo en la semana que los llene.

Taller, es mi respiro semanal. Mi oxígeno. Mi árbol de otoño.

Hace 9 años mi profe y amiga, Cecilia Muñoz, me hizo enamorarme de la poesía. Si lees esto, Che, gracias por eso.

Finalizando y dejando en clara mi opinión, la poesía no se explica, se siente. 

Ojalá pueda hacerlos sentir algo.